976 467 850 | L-V 9:00-14:00 /16:00-20:00 info@kronoscenter.com

Los carteles para empresas pueden parecer sencillos de realizar, pero nada más lejos cuando queremos que su contenido sea efectivo, ya que en caso de cometer errores en su diseño o en alguno de sus elementos esenciales, pueden causar el efecto contrario al que queremos transmitir.

Carteles para empresas: las cosas que no debes hacer

Si comenzamos desde lo más llamativo, hay que tener mucho cuidado con insertar un diseño mal centrado, o un titular que se coma el propio contenido del cartel que has diseñado.

Los carteles poco armónicos en general “chirrían”, y cualquiera que eche un primer vistazo, aunque no sea experto en la materia, nota enseguida que algo no cuadra en el cartel, ya sea el mensaje o el diseño.

Las imágenes deben estar siempre en alta calidad y el cartel debe estar poco cargado de texto. Volvemos al concepto de armonía, por lo que además, los colores a utilizar no deben ser recargados ni estridentes.

El título debe ser representativo, pero corto y llamativo, con un texto que identifique de forma efectiva lo que pretendemos manifestar, junto al nombre de la empresa, el mensaje debe ser directo y claro.

No debemos nunca sobrecargar el cartel de texto: siempre hay un punto exacto en el que parar de escribir. Excedernos con el texto es un error muy común y la realidad es que la gente se cansa de leer. Un cartel es para obtener toda la información de un solo vistazo.

Siguiendo con la información, un error muy común es estructurar mal esa información y ofrecer datos que no son útiles ni relevantes. Esto hace que, seguramente nos excedamos en la cantidad de texto, y volvemos a conseguir que el público no se detenga en su contenido o en su mensaje.

A la hora de maquetar volvemos a caer una y otra vez es un diseño de escasa calidad, poco armónico, con las fotografías colocadas como a salto de mata, dando una visión que distorsiona el conjunto.

Otro error muy común relacionado con el texto y el diseño es utilizar un tipo de letra poco visible o poco clara, que no seamos capaces de vislumbrar desde cierta distancia, lo que tiene mucho que ver con que el cartel resulte recargado, porque si hay espacio suficiente y la ubicación e interrelación de imágenes y texto es la correcta, no necesitaremos poner un tipo de letra imperceptible.

En relación a esto último, en los textos, el interlineado, color, tipo de letra, que el texto esté justificado y bien centrado parece que son exigencias obvias, sin embargo, por lo obvias, en muchas ocasiones se comete el error de no caer en la cuenta de su carácter esencial.

Tu cartel está mandando un mensaje, claro y directo, por lo que no debes descuidar la uniformidad y la armonía de conjunto, realizando una correcta elección de la gama cromática, y procurando que nada robe protagonismo al mensaje visual y sensorial que estás lanzando.

La prioridad es que la empresa para la que se elabora el cartel sea lo que quede en la retina, por lo que no debemos cometer el error, muy frecuente, de hacer que se pierda de vista lo importante.

En este sentido, no debes cometer el error de lanzar mensajes de marca que sólo lleguen al público que ya conoce la marca, sino que la base es captar la atención de cualquier tipo de espectador, y ser comprensible y llamativo para todo tipo de personas y de todo tipo de nivel socio cultural.

Aunque en cierto modo vaya dirigido a un cierto tipo de público que será el usuario potencial de los servicios de nuestra empresa y las imágenes que usemos deben despertar sentimientos en ese público al que nos dirigimos.

Es cierto que todos conocemos carteles de empresas que publicitan su marca con tan sólo una imagen o una frase, pero esto suele funcionar únicamente para marcas archiconocidas y que se identifican con total claridad por todo el mundo sin necesidad de añadir nada más, lo cual no es lo común.

No cometamos el error de utilizar técnicas absolutamente innovadoras para empresas que no se encuentran en ese posicionamiento comercial ni son las que copan un determinado nicho de mercado. Convertiríamos el cartel en inservible para su finalidad.

Tengamos en cuenta que un buen cartel debe pretende impactar, persuadir, ser eficiente y mantener viva una marca de empresa para atraer nuevos clientes y mantener a los que ya son fieles.

También hay que escoger muy bien el contenido del texto, las palabras que se van a utilizar, y debe estar muy bien diseñado, porque en ocasiones cometemos el error de eliminar todo el potencial de una gran idea, al utilizar un mal diseño o un diseño que no esté coordinado con el contexto.

Destacar las virtudes de la empresa o negocio de forma llamativa, creativa visualmente atractiva y moderna será un punto a favor y un reclamo interesante; y como hemos dicho desde el principio, no se debe descuidar la calidad técnica del cartel.

Por último no se debe caer en el error de principiante de realizar un cartel con programas que no son adecuados, sino que es necesario usar para el diseño los programas correctos para la dotar de la máxima calidad a la impresión: Indesing, Ilustrator y para los retoques fotográficos Photoshop (la suite de Adobe).

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
¡¡Volvemos el 28 de Agosto!!

Puedes seguir enviando tus presupuestos o archivos
pero se gestionarán a nuestro regreso.

Si realizas la compra de un libro,
te lo enviaremos a partir del 28 de Agosto.

 
Seguir navegando ->